En 1975 en la Universidad de Columbia, Lacan cuestiona la tendencia de un sujeto en análisis – a quien se le pide que diga cualquier cosa – a venir a hablar de su familia particular, a hablar « de eso a partir de lo cual (él) se aferra a su familia » [1]. Lacan precisa: « no es lo mismo haber tenido a su madre que a la madre del vecino, lo mismo con su padre» [2]. El sujeto está marcado por los significantes de su historia familiar, pero sigue existiendo una brecha entre la historia y lo real. Jacques-Alain Miller tiene una hermosa frase que resume el pensamiento de Lacan, desarrollado en la clase del 21 de mayo de 1969 en su seminario De un Otro al otro: « el sujeto surge, no del significante, sino “de la relación indecible al goce” » [3]. Si hay una novela familiar, ésta está escrita a partir de lo que marcó al sujeto, de lo que se le ha dicho, callado, susurrado, o gritado. Esto concierne entonces, a la relación con el deseo del Otro y con la opacidad del goce del Otro.
Así, el texto de Alexandre Stevens, nos invita a pensar la biografía familiar como velo de una articulación imposible del goce con el saber. Christophe Le Thorel propone subvertir las ideas de los conflictos de lealtades, por la idea de la marca del goce que determina a los sujetos acogidos en institución. Finalmente, Juliette Lauwers nos recuerda, que el crimen en el seno de la familia no es nada nuevo, sino que se encuentra en el fundamento mismo de su constitución.
¡Tres excelentes contribuciones para leer y compartir!
[1] Lacan, Jacques. « Conférences et entretiens dans des universités nord-américaines. Columbia University ». Scilicet. Nº6/7, 1976, p. 44. (La traducción es nuestra)
[2] Ibid., p. 45. (La traducción es nuestra)
[3] Miller, Jacques-Alain. « Una lectura del Seminario De un Otro al otro ». Freudiana. Nº55, 2009, p. 7-42
Traducción: Micaela Frattura
Relectura: ItxasoMuro